Maestros de sus propias almas.
Mientras que un hombre en el tercer siglo estaba anticipando su muerte, escribió estas últimas palabras a un amigo: "Es un mundo malo, increíblemente malo. Pero he descubierto que en medio de él, hay un pueblo santo y quieto que ha aprendido un gran secreto. Ellos han encontrado un gozo que es mil veces mejor que cualquier placer de nuestra vida pecaminosa. A pesar de que han sido despreciados y perseguidos, no les importa. Son maestros de sus propias almas. Han vencido al mundo. Esta gente se conoce por "Cristianos" -- y yo soy uno de ellos”. Revista "Hoy En El Mundo" del Instituto Bíblico de Moody, Junio de 1988, p. 18
Lecturas:
domingo, 10 de enero Mateo 2:9-12
lunes, 11 de enero Filipenses 4:4
martes, 12 de enero Juan 16:22
miércoles, 13 de enero Gálatas 5:22
jueves, 14 de enero 1 Pedro 1:8-9
viernes, 15 de enero Juan 15:11
sábado, 16 de enero Romanos 14:17