Muchos de nosotros somos como aquel pequeño niño que había roto el vidrio de un farol en la vía pública. Muy preocupado le preguntó a su papá:
-¿Qué puedo hacer?
-Admitir que tú lo has hecho, preguntar cuánto cuesta, pagarlo y repararlo -le respondió el papá.
Esta manera práctica de enfrentar los hechos no era lo que estaba esperando el niño, pues con un hilo de voz, confesó:
-Yo esperaba que lo único que tenía que hacer era pedirle perdón a Dios.
LECTURAS:
domingo, 9 de junio Marcos 3:28-29
lunes, 10 de junio Lucas 23:34ª
martes, 11 de junio Hechos 13:38-39
miércoles, 12 de junio Salmo 86:5
jueves, 13 de junio Hechos 3:19
viernes, 14 de junio Miqueas 7:18
sábado, 15 de junio Proverbios 28:13
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